En el acta de la sesión de fecha 28 de septiembre de 1895, el alcalde del Ayuntamiento de Estepona, el farmacéutico D. Andrés Rodríguez Sánchez, sobrino nieto del famoso periodista y político malagueño D. Andrés Mellado Fernández y marido de Dª. Salvadora Guerrero Navarro, prima hermana del diputado y terrateniente esteponero D. Cristóbal Navarro Díaz, informó de ciertas reparaciones en la torre del reloj.
Vista de Estepona de principios del siglo XX. Fuente: Archivo Histórico Municipal de Estepona |
Literalmente - sólo se ha corregido la ortografía del texto - transcribimos lo recogido en el acta:
«Por la Presidencia se hizo presente que según manifestación que le ha hecho Don Tomás Belgrano encargado del Reloj de la Villa, la campana de la Iglesia ruinosa "antigua Parroquia", que está colocada en la torre de ella, que cae a la calle de la Perla y mira al Este de esta población, había visto con sorpresa que el eje izquierdo en dirección al N. E. estaba desquiciado por tener quebrantado y doblado por esta parte el hierro que lo constituye, amenazando por tanto inminente peligro en desprendimiento, que milagrosamente no había tenido ya lugar, y por tanto se imponía la necesidad de su reparo.
Que esta Alcaldía con el fin de evitar las fuertes consecuencias que con el desprendimiento de dicha campana pudiéramos lamentar, ya en las casas próximas a la Parroquia cuyos habitantes corrían grave riesgo, y evitar también los inmensos gastos que proporcionaría los desperfectos que habría de sufrir la campana y su nueva colocación; afectando este hecho a la colectividad del vecindario y considerando de suma urgencia la evitación de tales perjuicios, esta Alcaldía dispuso que por los Maestros Cerrajeros, Juan Rubio Toledo e Ildefonso Blanco Infante y Carpinteros, Rafael Gálvez y Alarifes Manuel y Ricardo Vázquez en concepto de Peritos públicos, y por los medios que la ciencia aconseja procedan en primer término y como medida preventiva el aparejo, con oportunos borriquetes de madera a la preparación de dicha campana a fin de evitar su caída, y en segundo a la construcción de un nuevo eje de hierro en condiciones de estabilidad que le sirva de sostén y ofrezca completa garantía en su nueva colocación.
Comparecidos en el acto dichos Peritos y requeridos para su cumplimiento procedieron a la ejecución de dichos trabajos, pudiendo asegurar a la presente Corporación que en estos momentos ha desaparecido el peligro que amenazaba.
Instruido suficientemente el Ayuntamiento por unanimidad acordó sancionar en todas sus partes el acertado procedimiento del Sr. Presidente dándole un voto de gracia por su reconocido celo en bien de sus administrados; y en razón de no haber consignación especial en el Presupuesto para atender a este nuevo gasto se satisfaga del Capítulo de imprevistos del mismo previa la oportuna cuenta justificativa.»
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